Caí redondito en la trampa del autor.
Todo #productivitygeek ve ese título y salta a comprarlo. Pero lo que va a encontrar, sí que no es lo que se espera.
Es una burla filosófica, a esas ganas de ser amo y maestro del tiempo. A esas ganas de convertirse en el súper óptimus prime tan pero tan eficiente que puede con todo, que acaba sus to-dos, tiene doce proyectos, duerme 4 horas y no le dice que no a nada.
Es una burla bien jalada, porque aunque te vas viendo reflejado en su sátira, no puedes parar de leerlo y terminas con una perspectiva de vida diferente. Me cambió algo por allá bien adentro.
¿Cómo lo aborda?
Ve, no hay tiempo para todo. No lo intentes, que no lo hay. No te va a alcanzar. Es que hay un problemita, nos regalaron una cabeza capaz de lograrlo todo en su imaginación, pero un tiempo microscópicamente corto como para pasarlo a la realidad.
Y no queremos aceptar esa verdad. No queremos aceptar que no podremos hacer todo lo que queremos. Que no hay tiempo suficiente.
Entonces ahí es donde vienen todas las técnicas de productividad, efectividad, pomodoro, kanban, sprint y la que estés usando en este momento. Ahí vienen a negarnos esa realidad, a hacernos creer que alcanzar a lograr todos mis sueños es cuestión de organización.
Pero sabes que, manejar el tiempo no es de sistemas, es de tomar decisiones difíciles. Es de escoger una opción por encima de muchas otras que te fascinan y te mueres por hacer.
Y esa decisión se convierte en la luz que le da sentido a todo. Caer en cuenta en lo que estoy sacrificando por escoger este proyecto, este momento, esta pareja, este destino, es lo que hace este instante, uno especial.
Mientras más creas que hay tiempo para todo, menos presión tendrás para evaluar el sacrificio, para evaluar si lo que estás haciendo en este momento es el mejor uso de tu tiempo. Si nunca piensas en el sacrificio, nunca sabrás si vale la pena.
Esa es la tragedia de la productividad, nos hace vivir en un mundo imaginario donde habrá tiempo para todo mientras se nos escapa este periquete de vida real.
Y la cantidad de enseñanzas que te deja para aplicar su tesis hace que cada página sea tiempo muy, pero muy bien invertido.
